miércoles, 9 de septiembre de 2015

Marcelo Castillo, Presidente de la Federación de Colegios Profesionales, llama a movilizarse unidos por la ética y la calidad



Santiago, jueves 3 de septiembre 2015.- Un respaldo unánime de la audiencia asistente a la Asamblea Anual de la Federación de Colegios Profesionales Universitarios, tuvo el discurso de la cuenta anual, Aniversario, a cargo de su Presidente, Marcelo Castillo, quien hizo un llamado a la movilización de manera conjunta por la ética profesional y la educación superior de calidad.
Junto a ese objetivo, el dirigente remarcó como desafíos futuros y permanentes de la Federación: la recuperación de la colegiatura obligatoria; evitar el canibalismo entre profesionales y fortalecer a las organizaciones.
La ceremonia contó con la presencia de los representantes de los Colegios Profesionales participantes, y del actual Subsecretario de Agricultura, y Past Presidente de la Federación de Colegios Profesionales, Claudio Ternicier González.
La autoridad de gobierno, en su mensaje de celebración de aniversario, abogó para que la Reforma Educacional sirva de instancia de discusión frente al tema del rol ético de los Colegios Profesionales.
Por su parte, Marcelo Castillo, en su cuenta anual, lamentó la actitud dilatoria de autoridades frente a Proyectos importantes como los emblemáticos de este movimiento: Proyecto de Ley de Exclusividad Universitaria de carreras de la salud, y Proyecto de Ley de Colegios Profesionales.
Destacó la firma de acta de constitución del 21 de agosto de 2014, cuando se inició la organización con la participación de 10 colegios profesionales, para destacar que a un año de ese evento, ya son 15 los colegios afiliados.
Dijo que los colegios Profesionales deben ser corporaciones de derecho público, garantes de los códigos de ética, válidos para todos los profesionales, y que son ley para todo el país.
Además, planteó la diferencia de un colegio profesional con los sindicatos, porque indicó, cumplen funciones diferentes.
Aseguró que para lograr la Colegiatura obligatoria, que es uno de los objetivos centrales de la organización, era necesario establecer objetivos claros y una organización fuerte.
En relación al Proyecto de Reforma a la Ley de Educación Superior, destacó el trabajo obtenido en las Jornadas por la Reforma realizadas en coordinación con el Ministerio de Educación, en la que participaron 40 dirigentes, el 5 y 12 de junio pasados.
De lo que se desprende el Decálogo entregado al MINEDUC, el pasado 20 de agosto con la propuesta de Garantes de la Calidad de Profesionales de Chile, que al término de la actividad, fue firmado por representantes de los Colegios.
CONCLUSIONES Y ACUERDOS DE LA FEDERACION DE COLEGIOS PROFESIONALES UNIVERSITARIOS DE CHILE

1. La regulación tanto de la calidad como de la cantidad de universidades debe hacerla el Estado, de la misma manera que debe regular la calidad y la cantidad de profesionales que se forman conforme a las necesidades reales del país.
2. Consideramos que se deben establecer estándares de calidad mínimos para las universidades y las carreras que impartan. Estos estándares deben cumplirse por las casas de estudio antes de abrir sus puertas y de recibir matrículas de estudiantes. En la actualidad existen numerosas universidades que no cumplen con el paradigma de la reforma educacional propuesto por el Mineduc ni tampoco con estándares mínimos de calidad conforme a los estándares internacionales.
3. La Federación propone la creación de un Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior. Este mecanismo debería asegurar al país, en función de un modelo de desarrollo nacional convenido mediante procedimientos democráticos, la formación de los mejores profesionales para Chile. Este Sistema de Aseguramiento de la Calidad debe operar en el ciclo de entrada, uno intermedio y otro de salida. Al no tener acreditación de calidad una institución universitaria, no debería estar apta para formar profesionales.
4. Las competencias y conocimientos del pregrado deben ir acorde a las necesidades del país. Lo anterior, entendiendo al país como una comunidad y no como un conjunto de individuos. Este as imprescindible para resolver que tipo de profesionales y técnicos se requiere y en que número. Definir, como país, cuáles deben ser las Competencias del pregrado (conocimientos y habilidades) y definir, a partir de ello, los postgrados en sus diversos niveles. No todos ellos requieren título de Especialista y no puede haber Especialistas para temas y áreas que pueden y deben ser resueltos por el profesional titulado. En la instancia de calidad de la formación profesional pensamos que los Colegios Profesionales deberían tener un papel protagónico, junto a otras instituciones como Sociedades Científicas, el Ministerio de Educación y las Universidades. Diversos países en el mundo han entregado a los Colegios Profesionales esta responsabilidad.
5. Existe consenso al interior de esta Federación de Colegios Profesionales que, siguiendo prácticas internacionales, debería existir un mecanismo de habilitación profesional, que asegure que los profesionales tienen las competencias necesarias para ejercer. Para ello los profesionales deberán estar en un proceso de educación continua que le garantice al país la puesta al día en materia de conocimientos requeridos para cada profesión; se deben crear los mecanismos colegiados que garanticen una supervisión pública independiente de quienes prestan el servicio educacional y con participación activa de los Colegios Profesionales, quienes además deberán realizar la tuición ética de todos los profesionales.
6. El Estado debe financiar la oferta de calidad pertinente a las necesidades del país. A nuestro juicio es impresentable que se destinen recursos públicos para subvencionar la demanda y a su vez el lucro en instituciones universitarias privadas, en su inmensa mayoría de mala calidad. Existen restricciones de los recursos públicos disponibles, asimismo la calidad de formación que reciben los estudiantes en la actualidad no es satisfactoria, por lo que se debe satisfacer la demanda real de profesionales del país, conforme a un plan estratégico de desarrollo del mismo. La oferta insuficiente de profesionales es indeseable, de la misma manera que la sobreoferta es despilfarro de recursos públicos para el país y a la vez un engaño para las familias y jóvenes que esperan mejorar su calidad de vida mediante la educación universitaria, cuestión que no se cumple en la actualidad.
7. Regulación de la Matrícula de la Educación Superior Universitaria. A juicio de esta Federación de Colegios Profesionales, la cantidad de profesionales es quizás el tema más crítico. Para algunas carreras de la salud, la OMS da recomendaciones de cantidad de profesionales por cada mil habitantes, sin embargo para la mayoría de las profesiones no existen estas recomendaciones, por lo que ha juicio de esta Federación deberían tomarse como referencia las cifras de los países de la OCDE que tengan los mejores indicadores en educación, estableciendo la cantidad de profesionales por cada mil habitantes en cada área, regulando la cantidad de matrículas para cada profesión basado en estos indicadores, El no hacerlo significa fomentar el lucro, el engaño y condenar a la cesantía a millares de jóvenes profesionales que no tendrán campo laboral para ejercer, sin contar además. el despilfarro de recursos públicos.
8. Financiamiento de la Educación Superior Universitaria. Considerando la educación como un derecho y no un bien de consumo, la educación superior universitaria debe ser para todos quienes demuestren tener las capacidades necesarias para recibirla, independiente del grupo socioeconómico al cual pertenezcan, y es el Estado quien debe garantizar la gratuidad en las Universidades Públicas y no a través de un boucher para los estudiantes, que permitan financiar universidades privadas sin ningún tipo de regulación de calidad. Se debe realizar un financiamiento independiente para la docencia e investigación, a juicio de esta Federación se debe eliminar el “arancel de referencia”, debiendo establecerse los costos reales de la docencia para cada carrera, separándolos de los costos de la investigación y otras actividades universitarias. Actualmente parte de los aranceles pagados por los estudiantes financian la investigación o incrementan más allá de lo necesario el patrimonio de algunas universidades.
9. No estamos pidiendo el cierre de las Universidades Privadas. Pero como toda empresa privada, deben ser ellas quienes generen sus clientes y sus recursos, no debe ser el Estado quien subvencione el funcionamiento de estas empresas privadas con recursos públicos que pertenecen a todos los chilenos y que se requieren con urgencia en otras áreas como la salud y otras.
10. Se debe eliminar la existencia de agencias privadas de acreditación. Todo el Sistema de Acreditación, tanto para universidades como para carreras debe ser completamente público, con la participación de Sociedades Científicas y Colegios Profesionales.

VICTORIA MARIN CAMPOS
PERIODISTA


No hay comentarios:

Publicar un comentario